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Registrar un dominio no es una tarea baladí, es más importante de lo que puedes pensar porque cuando la página ya está creada, tus clientes te identificarán y buscarán por el mismo nombre, por lo que no es recomendable cambiarlo.

¿Qué te conviene más para tu negocio? Lo importante es que el nombre sea corto, fácil de pronunciar y que cuente con una palabra clave que te identifique con tu marca. A partir de ahí, ya puedes elegir la extensión del mismo. Hasta ahora la mayoría de las compañías optaban por los .es y .com pero lo cierto es que éstos ya están saturados y encontrar uno libre es una tarea complicada. Los primeros eran elegidos por asociarse con productos vinculados con España o por un mejor posicionamiento en Google, aunque con los .com también se consigue un muy buen posicionamiento y un mayor reconocimiento de marca.

Tras ellos, hasta ahora, las empresas optaban por los .net, con un precio más económico y los .org, proveniente de organización.

Sin embargo, los nuevos dominios podrán diferenciarnos mucho mejor a la hora de vender y darnos publicidad, en función del tipo de negocio que tengamos. Así .tienda, .web o .viajes, si cuentas con un comercio, te identificarán mejor o sabrán dónde está tu negocio con un .Barcelona o .Madrid, por poner algunos ejemplos, ayudando a las empresas locales a incrementar su presencia en Internet, a mejorar tu posicionamiento en las búsquedas o aumentar tus ventas, ya que los posibles clientes sabrán dónde están los negocios más cercanos.

La idea es diferenciarte, posicionarte, ayudarte en tu negocio con todas las herramientas disponibles y el dominio es la primera de ellas porque dirá mucho de ti, los consumidores se acordarán mucho más de tu negocio y resultarás más atractivo que el resto de tus competidores. Además, gracias a estas extensiones conseguirás un mejor posicionamiento en los resultados de búsqueda.