Temas: Empleo, Estadísticas, Laboral, Opinión, Paro

No ha comenzado bien el año en términos laborales en la provincia con un incremento del paro del 2,95% en el mes de enero, lo que se traduce en 711 nuevos desempleados, la mayoría del sector servicios, que han engrosado la lista de demandantes de empleo hasta las 24.841 personas.

Es un porcentaje que está en línea con la subida del paro a nivel autonómico, que registró un incremento del 2,98%, y por encima del dato nacional del 2,49%. Sin embargo, en términos interanuales, León sigue arrojando un saldo positivo, una bajada del desempleo del 4,42%, con 1.150 parados menos que hace un año, cuando en España la reducción es mayor, hasta el 6,87%, y en Castilla y León se queda en el 3,41%.

Tampoco las afiliaciones a la Seguridad Social arrojan datos positivos cuando la cifra media de afiliación se quedó en 160.720 personas en la provincia, 2.086 cotizantes menos que el mes anterior y 960 afiliados más que hace un año.

Como venimos advirtiendo desde hace meses, el frenazo en la actividad económica y las dificultades que están teniendo las empresas están afectando al mercado laboral, con subidas del paro en los últimos cinco meses, a excepción de diciembre. Aunque la amenaza de recesión está cada vez más lejos, el clima de inseguridad, de máxima incertidumbre, de inflación y encarecimiento de la financiación, unido a medidas como la anunciada subida del SMI están provocando que las empresas se lo piensen mucho a la hora de hacer nuevas contrataciones.

Echamos en falta políticas útiles que favorezcan la formación y recualificación de los trabajadores desempleados, que mejoren la competitividad de la economía y que eleven la confianza empresarial, especialmente en provincias como la leonesa que acumula problemas estructurales como el envejecimiento, la dramática pérdida de población y la fuga de talento joven a otros territorios.