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La Asociación de Empresarios del Órbigo es la última en incorporarse al Círculo Empresarial Leonés tras Asemac, Aletic, Templarium y Aletur

El Círculo Empresarial Leonés (CEL) y la Asociación de Empresarios del Órbigo (AEDO), a través de sus respectivos presidentes, Julio Álvarez y Javier González, han firmado este mediodía en León un convenio de adhesión por el que AEDO se integra en el CEL, pudiendo beneficiarse tanto de sus instalaciones en el centro de la capital leonesa como de la amplia cartera de servicios que ofrece esta organización empresarial.

La intención del CEL con la incorporación de una nueva asociación comarcal de empresarios, como es AEDO, es seguir dinamizando y sumando fuerzas entre el tejido empresarial de la provincia, estableciendo sinergias de colaboración entre empresarios y emprendedores de ambas organizaciones para afrontar con mayores apoyos y garantías la recuperación de la actividad económica y del empleo en las zonas rurales.

Gracias a este acuerdo ambas asociaciones salen reforzadas y con mayor capacidad de iniciativa y respuesta ante las demandas de empresarios, comerciantes, autónomos, jóvenes emprendedores de la comarca del Órbigo que buscan reforzar sus negocios y encontrar mejores oportunidades de desarrollo en la ribera del Órbigo, contribuyendo a la generación de riqueza y puestos de trabajo en la provincia de León.

Tras las incorporaciones de Aletur, Templarium, Aletic y Asemac, AEDO pasa a formar parte del CEL, conservando su autonomía y capacidad de actuación. Cabe recordar que AEDO es una asociación multisectorial de la comarca del Órbigo, con sede en Veguellina, compuesta por alrededor de 85 empresas y autónomos.

Tras la firma del acuerdo, el presidente de AEDO, Javier González, reclamó más atención e inversiones en zonas que han sufrido un declive industrial como es el caso de Veguellina y los municipios de la ribera del Órbigo, con el cierre de la azucarera y el envejecimiento progresivo de su población. “Nuestro objetivo es luchar por la comarca del Órbigo y aunar esfuerzos de los empresarios de toda la provincia para recuperar el atractivo industrial que siempre tuvo esta zona y lograr que los 85.000m2 en desuso de la antigua azucarera se destinen a algún proyecto industrial porque reúne todos los requisitos para resultar atractivo”.